Silencio, se juega en Wembley

Que nadie se asuste cuando hoy a las 20.45 enciendan sus televisores y encuentren casi la misma escena de hace dos años. Guardiola y sus hombres; Ferguson y sus hombres; Barcelona, campeón de la Liga; Manchester, campeón de la Premier; final de Champions. Y sí, sigue siendo 2011.

Josep Guardiola y Alex Ferguson se volverán a ver las caras esta noche en Wembley, después de que en 2009 el entrenador del Barcelona le arrebatará el título de Liga de Campeones a su homónimo del Manchester con un 2-0 final. Pero no son los únicos que repiten. Hasta 15 jugadores de la final de hace dos años regresan esta vez a plantar sus botas en el césped para luchar en cuerpo y alma por el sagrado trofeo.

Y no es lo único por lo que luchan. Wembley es una especie de templo sagrado para Barcelona y United (aunque aquel donde comenzaron a escribir su historia fue derruido, ya se sabe que donde hubo fuego, quedan las cenizas). Supuso el estreno de ambos equipos en degustar el sabor de la victoria del gran título continental (Manchester, 1968; Barcelona, 1992), y supone, en el encuentro de esta noche, alcanzar su cuarta copa del torneo.

Cabe esperar que esta noche podremos ver fútbol, pero fútbol de verdad, del bueno. Posible es, calidad sobra. Mi ruego: que no sea un Messi Vs Rooney; que el árbitro no ocupe las portadas del día siguiente; que haya juego, ataque, defensa y gol; que sea un once contra once persiguiendo el balón sin descanso; y que, cuando la copa se alce a lo alto, podamos decir sin ningún pero: “Enhorabuena”